Vivimos en una sociedad obsesionada con el físico. Las redes sociales, el cine, la publicidad, todos nos recuerda la importancia de tener un aspecto «perfecto»: sin acné, sin celulitis, sin estrías, sin ojeras…

Fotografías previamente editadas en las que ni los propios protagonistas se reconocen, y por supuesto, a semejarse a unos filtros que distorsionan nuestra apariencia haciendo que después sea imposible mirarnos en el espejo.

¿A quién no le gusta gustar?

¿A quién no le gusta que le piropeen?

Los piropos son parte de nuestra comunicación, el problema viene cuando la forma de hacerlo no es la correcta o cuando lo hacen desconocidos. 

IDEAS DE PIROPOS BONITOS:

• «Me encanta hablar contigo porque me siento totalmente comprendid@» Haciendo alusión a lo cómod@ que te sientes con esa persona.
• «Hasta en los momentos más difíciles tú me haces reír» Esta frase no sólo saca a relucir lo divertid@ que es, sino también a su capacidad de apoyarte cuando estás pasando una situación difícil.
• «Gracias por ser mi pareja/madre/padre/amig@» ¿Alguna vez agradeces a la gente que te rodea por estar ahí, sin necesidad de que hayan hecho algo especial por ti, sólo por su mera presencia?
• «Admiro tu forma de gestionar las cosas, sé que últimamente lo has pasado mal, pero estoy orgullos@ de ti» Si una persona ha pasado una racha complicada este tipo de piropos le hará sentir reconfortad@.
• «Para mí eres un ejemplo a seguir» Diciendo esto demuestras que no solo admiras a esa persona sino que quieres ser como él/ella, en alguna parcela de tu vida.
• «Consigues convertir todo en algo único, pero es que bailar/dibujar/escribir/debatir se te da especialmente bien» Siempre es buen momento para resaltar aquellas parcelas en las que esa persona destaca.

Aprende a mirar con el corazón